Acabé con dulce, aunque no fue planificado y vuelvo con otro, este bizcocho de agua me ha llamado mucho la atención por su sabor y esponjosidad, y además, al no llevar nada de grasa reducimos algunas calorías. He probado también a congelar un pedazo y aguanta muy bien el proceso de congelación y descongelación, aunque he de reconocer que en este caso no es necesario porque, sorprendentemente a A también le gusta y ha sido congelarlo para descongelarlo en dos días.
La receta la encontré en el blog de Asopaipas y la verdad es que mi única aportación pasa por sustituir la ralladura de limón por unas gotas de esencia de limón, básicamente porque parece que estoy peleada con los limones y nunca tengo cuando los necesito.
5 huevos
330gr de azúcar
330gr de harina
250gr de agua
unas gotas de esencia de limón
1 cucharadita de levadura química
Mantequilla o aceite para engrasar el molde
5 huevos
330gr de azúcar
330gr de harina
250gr de agua
unas gotas de esencia de limón
1 cucharadita de levadura química
Mantequilla o aceite para engrasar el molde
Precalentar el horno a 180º. Separar las claras de las yemas y montar las primeras al punto de nieve (en mi caso en la thermo porque soy un poco torpe y no sé hacerlo de otra forma). Batir en un bol las yemas con el azúcar y tamizar por encima la harina con la levadura e ir añadiendo el agua poco a poco. Añadir unas gotas de esencia de limón e incorporar las claras montadas. Para que no se bajen hay que mezclarlas desde fuera hacia dentro y de abajo hacia arriba. Pintar un molde de corona con aceite y verter la mezcla.
Hornear a 170º durante 45-50 minutos.